Durante este encuentro dominical, Maitreya Rael nos habló sobre el cambio.
Aunque muchas personas pueden sentir que son las mismas que cuando eran jóvenes, todos cambiamos, incluso si nuestros recuerdos pueden darnos la ilusión de que permanecemos sin cambios.
Todos sabemos que las células de nuestro cuerpo se renuevan cada segundo, y lo mismo ocurre con nuestra mente, incluida nuestra conciencia.
Evitar el cambio, nos dice, no solo es imposible sino que puede conducir a la rigidez e incluso a la enfermedad mental en los casos más extremos.
Rael nos invita a aceptar el cambio, a disfrutarlo, a convertirnos en agentes del cambio mismo, a buscarlo.
El cambio es como una ola, «Disfruta surfeando los cambios en la ola de la vida». Conviértete en la ola misma, en lugar de terminar como una pajita arrojada en la corriente por los cambios, nos dice.
Necesitamos volvernos flexibles, como un río, y ser los que provoquemos cambios, positivos, particularmente en nuestra personalidad, en nuestras interacciones con las personas, como convertirse en amor, que es lo más alto que uno puede llegar a ser.
